Un año después de que viera la luz en francés, con ocasión de la beatificación de Ana de Jesús (2024), tenemos la alegría de anunciar que la obra de Christiane Meres, Anne de Jésus. L’essor du Carmel thérésien (Éditions du Carmel), ha sido traducida al español con el título Ana de Jesús. El Carmelo teresiano se extiende por Europa (Grupo Editorial Fonte, 2025).
La traducción ha sido realizada por Michèle Marie Thomy, ocd, del Carmelo de Donamaría, y María Soledad de las Cuevas, profesora de Letras Clásicas, quienes han hecho accesible en nuestra lengua un texto que es, sin duda, una excelente introducción a la vida de esta mujer clave en la expansión del Carmelo descalzo.
El libro recorre, con rigor y sensibilidad histórica, las distintas etapas de la biografía de Ana de Jesús (Medina del Campo, 1545 – Bruselas, 1621): desde sus años en Castilla junto a santa Teresa, hasta sus fundaciones en Francia y en los Países Bajos españoles, donde culminó su misión. La autora no busca tanto redactar una nueva biografía como dejar que aflore la personalidad de esta carmelita, verdadera capitana de las prioras.
Nos alegramos especialmente de esta publicación del Grupo Fonte, porque no son muchas las obras dedicadas a Ana de Jesús, y este volumen aporta una mirada renovada, bien documentada y muy útil para quien desee acercarse a su figura.
La web de la editorial nos ofrece el índice y las primeras páginas del libro, que permiten asomarse a su enfoque y estilo, y que invitan a continuar la lectura.
Lee el comienzo de la obra en este enlace
Teresa, de la rueca a la pluma 
Buenos días, Después de la beatificación de la Madre Ana de Jesús, ha habido mucha difusión acerca de ella. ¿Qué hay de Jerónimo Gracián?, creo que en la propagación de la obra de Santa Teresa de Jesús, los dos tuvieron un papel muy importante. Gracias por leer estas pobres letras. Héctor Becerril
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Sí, es otra figura que merece ser puesta en valor. Totalmente de acuerdo, pero lo uno no quita lo otro. El proceso de Ana de Jesús se introdujo en el siglo xvii y hasta el XXi no se llegó a la beatificación, así que merece ser celebrado.