«El Libro de la Vida»: taller de lectura con Aurora Egido

Club_Lectura_Aurora_Egido_3El miércoles 3 dio inicio el taller de Lectura sobre el Libro de la vida  dirigido por la catedrática de literatura y académica Aurora Egido. El próximo miércoles, tendrá lugar la segunda y última sesión.
Este acto forma parte de los actos celebrativos que la Real Academia Española ha puesto en marcha a lo largo de 2014 con motivo de su III Centenario.
Esta información está extraída de la crónica que publica la Academia en su página:

En esta primera sesión, Aurora Egido ha comenzado explicando el contexto histórico y literario de la autora y de la obra, recordando que se trata de «un libro muy misterioso, lleno de silencios, vacíos e imprecisiones, que hace honor a lo que es la mística». Estos misterios, ha añadido, «hacen que el relato se aparte del concepto de historia fechada y entre en el terreno de algo que se cuenta como verdad pero que, sobre todo, busca lo verosímil». Y es, curiosamente, «conforme avanza la obra y santa Teresa se siente más segura como escritora» cuando las precisiones van aumentando.

La profesora Aurora Egido, a continuación, se ha referido a la voluntad de santa Teresa de «no nombrarse a sí misma. De escribir lo mejor que pueda pero sin ser conocida». Es este sentido de la ocultación una de las «marcas de la obra». No obstante, «luego sí quiere que la conozcan, que se sepa que ha sido elegida, que tiene experiencias únicas y, además, que desde el momento en que se une con Dios, será Dios quien lleve su pluma». Toda esta situación, como ha explicado Egido, era muy peligrosa en el momento en que escribe, por lo que continuamente tiene que estar empleando una estrategia para no levantar sospechas. Y es ahí donde «encontramos otro elemento fundamental: la paradoja, que es constante, y en eso estriba, precisamente, la actualidad de santa Teresa».

Antes de analizar el texto más detenidamente, Aurora Egido ha resaltado lo que es, para ella, «una de las grandes novedades» de la obra. El Libro de la vida, en el que hay tanto un nivel narrativo como uno didáctico, es un libro de experiencia, porque lo que pretende realmente santa Teresa es «contar, desde su experiencia, los distintos grados de oración. Pero al contarlo como experiencia vivida se aparta del tratadismo de la época», algo que podemos ver también en el Lazarillo de Tormes.

Otro de los aspectos fundamentales desarrollados por la académica Aurora Egido en esta primer sesión ha sido el del pecado aplicado a la escritura. Santa Teresa, mujer, descendiente de judeoconversos y no letrada, teme que la juzguen. Entonces el «pecado de escribir se inserta en su vida junto con el pecado de leer, que aparece ya desde las primeras páginas». A partir de ese momento, «santa Teresa se sitúa en un plano de humildad que poco a poco va avanzando hasta dar, paradójicamente, una vuelta y convertirse, la escritura y la lectura, en un medio de redención y de afirmación en sí misma». De lectora dudosa, de pecadora que se confiesa y de persona aconsejada, santa Teresa se convierte, al final, en maestra de almas y en consejera, superando esos titubeos iniciales que ella utiliza con aparente estilo humilde para captar la benevolencia de los lectores.

Todos estos asuntos analizados por Aurora Egido en esta primera sesión del Club de Lectura, se ampliarán y debatirán junto con los participantes del taller la semana próxima.

Fuente: RAE.es