Durante los días del 9 al 14 de este mes, en el CITeS Universidad de la Mística de Ávila, se han dado cita cerca de 40 monjas Carmelitas Descalzas de las Federaciones OCD de España. Estos encuentros formativos y de estudio vienen realizándose con mayor intensidad y mejor organización desde el año 1992; anualmente son cíclicos en cuanto que, un año participan las más jóvenes y el siguiente las de mayor edad.
El CURSO INTERFEDERAL de las Carmelitas Descalzas de las Federaciones de la Orden del Carmelo Descalzo (OCD) de España, ha reunido en esta oportunidad a monjas, hijas de Santa Teresa de Jesús, de cinco Federaciones a saber: Andalucía, Aragón-Valencia, Castilla-Burgos, Cataluña y Navarra. Todas ellas de los Monasterios Carmelitanos de Granada, Málaga, Alquerías, Altea, Puzol, Burgos, Loeches, Medina, Orense, Oviedo, Toledo, Toro, Valladolid, Tarragona, Mataró, Olza, Donamaría, Vitoria, San Sebastián, Calahorra y Hondarribia.
El P. Teófanes Egido, Carmelita Descalzo, ha sido el encargado de dictar las reflexiones de este “Curso de Formación Permanente” dedicado al estudio de “Las Cartas” de Santa Teresa de Jesús, la fundadora del Carmelo Descalzo. Dentro del programa, entre otros temas se ha hablado acerca de “los tormentos y las barahúndas, los cansancios y precaria salud” conque La Santa de Ávila escribió sus libros y particularmente sus cartas. También se ha hablado de los sentimientos de la Madre Teresa, su sentido familiar, su ternura con las hermanas de comunidad e incluso con san Juan de la Cruz, el sentido o sentimiento del humor y de la alegría en sus monasterios, el sistema postal que utilizó la fundadora con lo que iba por correo desde cartas, reliquias, imágenes, hornillos, hasta truchas, patatas y sardinas, por citar algo.
Afirma Teófanes, que “la Santa abulense es considerada por los historiadores una de las fuentes históricas más elocuentes para conocer el tiempo y la realidad social de su época”. Teresa de Jesús es una excepción por su inteligencia y mundo de sentimientos que le caracterizaban, sobre todo, la ternura. “Las Cartas” permiten al lector, entrar en otra dimensión que en otras circunstancias no pueden hacerlo sus otros escritos. En concreto, insiste el conferencista, la ternura, que en tiempos de la Santa era considerada como un signo de debilidad o de pecado. Las Cartas fueron el tormento de sus días y noches, pero fue el trabajo necesario y urgente al que se debió para sostener toda su obra y acompañar a sus monjas y frailes por el recorrido de sus fundaciones.
Texto: Iván Mora, CITeS
Fotos: IDJMP
Teresa, de la rueca a la pluma 
Me gustaría que me señalaran alguna de las cartas en las que se manifiesta la ternura de Sta. Teresa . Gracias escribo desde argentina
Gracias por leer y comentar nuestro blog. Escribo dos ejemplos de ternura en las cartas:
«La gracia del Espíritu Santo sea con vuestra reverencia, hija mía. ¡Y con cuánta razón la puedo llamar así! Porque aunque yo la quería mucho, es ahora tanto más que me espanta, y así me dan deseos de verla y abrazarla mucho» (A María de San José, en Sevilla, 22 de julio 1579)
A su sobrino Lorenzo de Cepeda, en Quito, intercediendo por una hija natural de este que ha dejado en España, 15 diciembre 1581:
«Harta misericordia de Dios ha sido topar tan bien y haberse casado tan presto, que según de temprano ha comenzado a ser travieso, trabajo tuviéramos. En esto veo lo que le quiero, que con ser cosa para pesarme mucho por la ofensa de Dios, de que veo se parece tanto a vuestra merced esta niña, no la puedo dejar de allegar y querer mucho. Para ser tan chica, es cosa extraña lo que parece a Teresa en la paciencia.
Dios la haga su sierva, que ella no tiene culpa; y así vuestra merced no se descuide de procurar que se críe bien, que en habiendo más años, no lo está adonde está; mejor se criará con su tía , hasta ver lo que Dios hace de ella. Aquí puede vuestra merced ir enviando alguna cantidad de dineros -pues Dios se los ha dado- y que se pongan a censo para los alimentos; de que haya doce años ordenará el Señor lo que se ha de hacer de ella, que es gran cosa criarse en virtud, que ahí se estará el rédito para lo que hubiere de ser de ella. Cierto lo merece, que es agradable y con ser tan chiquita no querría salir de aquí»
Que suerte han tenido estas monjas. Espero que lo hayan aprovechado. Tener al padre Teófanes Egido hablando de Teresa de Jesús, una de las voces más autorizadas de todo el Carmelo y maestro de tantos historiadores. Que suerte tiene la Orden del Carmelo con disponer de una visión tan profunda como es la del profesor Egido. Enhorabuena por este trabajo excepcional en esta página. Javier Burrieza
Gracias, Javier, por tus palabras. Comparto lo que afirmas sobre el P. Teófanes, y considero un privilegio haber contado con él para este curso.
Atención, en 1992 era General el P. Camilo Maccise, sucesor del P. Felipe Sáinz de Baranda. Saludos y gracias. P. I.Moriones
Gracias por el aviso. Vamos a comprobar si el error está en el año o en el nombre del General, y lo corregimos.